Un ultramillonario excéntrico del medio oriente pidió un Rolls-Royce Phantom EWB (de plataforma extendida) blindado contra prácticamente cualquier arma (soporta disparos de AK47, 570 disparos de Dragunov y dos granadas de mano, ¡todo a la vez!) y además con detalles de oro en todas partes.
¿Qué tantas partes? Pues ni más ni menos que 150Kg de oro de 18 kilates fueron usados en el exterior e interior del auto. Esto significa que hasta las mesitas para poner el iPad en la parte trasera son de oro. Los emblemas, el Espíritu del Éxtasis, molduras, la parrilla, biseles de los faros y las manijas de las puertas fueron forrados con este precioso metal.
La fastuosa creación la hicieron en conjunto las compañías Stuart Hughes (todos los insertos de oro) y Eurocash AG (blindaje) y les tomó 18 meses lograrlo.
Al dueño le costó poco más de $8.2 millones de dólares… ¡nada más!
